Gloria Trevi demostró ser la artista que no falla canciones

Su concierto tuvo clásicos como “Con Los Ojos Cerrados”, pero también éxitos más recientes como “Vestida de Azúcar” o la recién estrenada “El Vuelo”. Todos fueron cantados a pulmón.

Amada y odiada, aunque más lo primero debido a la masiva cantidad de fanáticos que tiene en todo América Latina y a la forma en que se ha consolidado como uno de los pesos pesados del pop latino durante más de 35 años, Gloria Trevi puede presumir un logro que muy pocos artistas de su género serían capaces de emular. Que independientemente de las tendencias, sus canciones siempre logran destacarse.

Por ejemplo, hace más o menos década, durante uno de los momentos de mayor éxito del reggaetón, era muy difícil que pegaran los temas que no fueran urbanos. Entonces, Gloria hizo lo que mejor sabe hacer, música. Convirtió en éxitos baladas gigantes como “No Querías Lastimarme” (No. 36 en el chart Hot Latin Songs de Billboard) o “Vestida de Azúcar”, pero también grabó canciones de otros artistas –como su icónica versión de “Cómo Yo Te Amo” de Rocío Jurado– y discos en vivo. También hizo un poderoso álbum junto con una de las pocas artistas mexicanas que compite en su liga: Alejandra Guzmán.

Además, cuando ha presentado nuevas canciones nunca ha fallado y recién cuando ya había demostrado que era capaz de triunfar haciendo pop, rock, baladas, ranchera, cumbia o lo que fuera, ahí sí… lanzó una canción con Karol G.

Así que lo de ayer fue más que el concierto de una artista de culto dentro del pop latino. Fue más bien, el concierto de una mujer que tiene tantos éxitos, de todas sus etapas, que tiene que visitarnos varias veces para repasar todo su repertorio. Por ejemplo, al observar su show de hace dos años se puede ver un setlist de temas bien diferente.

¡Ábranse p…! Llegó la “Medusa” 

Consciente de que, por lo menos, una parte nada minoritaria de su público canta a pulmón cada una de sus canciones, Trevi arranca su show de forma variada con composiciónes relativamente nuevas como “Medusa”, así como la megabalada “Qué Voy A Hacer Sin Él”, que hizo parte de su debut ¿Qué Hago Aquí? de 1989. El formato es el de una banda de rock (guitarra, bajo y batería), pero con dos trompetistas, dos coristas y un pianista (que interpreta dos órganos) como acompañantes.

Gloria vestida como una diva. Con unos tacones altísimos que dan dolor de pies con solo verla y que debe haberse dejado puestos por, al menos, una media hora. “Me Río de Ti”, su versión de la clásica “Gloria” (original de Umberto Tozzi) y “El Favor de la Soledad“, ratifican lo dicho anteriormente, que un show de Trevi no alcanza para escuchar todas las canciones que sus fanáticos considerarían infaltables.

“Ábranse Perras”, uno de sus éxitos de su etapa más reciente –aunque en realidad salió en 2019–, comienza con una larga introducción rock, que incluye hasta virtuosos solos de batería. Trevi aprovecha el momento para ir a cambiarse de outfit y vuelve vestida como una profesora. Bueno, como ese tipo de profesoras que todo adolescente heterosexual hubiera querido tener.

La canción sirve como preludio para uno de los momentos más rockeros de la noche, donde Gloria interpreta clásicos como “La Papa Sin Catsup”, “Zapatos Viejos” y “Los Borregos”, una canción que parece una infantil, pero realmente es una fuerte crítica al conformismo de la sociedad de la época en que fue lanzada, que contiene frases como: “yo no entiendo como siendo mil borregos, le tienen tanto miedo a un poco loco, retetonto, tosco lobo feo”.

Las canciones de Gloria Trevi son rocanrol o, por lo menos, tienen esa trasgresión y esa necesidad de expresar inconformismo que debería ser una constante en este género musical. La mexicana ha hablado de sus problemas personales, pero también de la necesidad de rebeldía, el embarazo adolescente y la diversidad sexual. Y ahí es donde puede entenderse cómo fue que la comunidad LGBT fue abrazando gradualmente su mensaje.

Porque Gloria Trevi no ha hecho canciones que sean exclusivas para ellos, sino que compone para todo su público, pero siempre remarcando que personas gays o no binarias son parte fundamental dentro de sus seguidores.

Suena la muy esperada balada “Vestida de Azúcar”, que termina en otro de esos momentos de performance en el escenario (como el “Ábranse Perras”, con la presentación rock) que sirven para que Gloria Trevi vaya a cambiarse de ropa. Mientras tanto, sus bailarines aparecen vestidos como bomberos para hacer el baile sexy de la noche. Cuando la artista vuelve tiene una chaqueta con llamas pintadas. Todo está claro, no hace falta que la Profe explique de más.

La performance sirve como introducción a “Me Lloras”, que minutos más tarde irá acompañada por “El Vuelo”, uno de los sencillos de su último álbum. Por lo general, cuando un artista presenta un tema nuevo en concierto, el público lo escucha más por amor al artista que por ganas de escuchar una canción no tan conocida.

Acá fue todo lo contrario, el corte de difusión de su disco presentado hace pocos meses fue coreado a pulmón. Además, los fanáticos la “bombardearon” lanzándole avioncitos de papel con colores brillantes, como si fueran los del arcoiris.

Otro momento sumamente emotivo fue cuando, luego de interpretar las baladas “No Querías Lastimarme” y la clásica “Con Los Ojos Cerrados” (No. 6 en el Hot Latin Songs de Billboard, su posición más alta en nuestro chart), Gloria aprovechó para hablar de las dos personas que considera fundamentales para mantenerse tan vigente en Colombia. La mujer y la niña que la han personificado en el concurso Yo Me Llamo: la quindiana Elain y la paisa Lala, quienes montó al escenario para interpretar el clásico noventero “Siempre A Mi”. La más chiquitita también tuvo su momento cantando “Zapatos Viejos”, versión con la que ha cautivado a los espectadores del programa.

Paradójicamente, la canción más cantada de la noche fue “El Recuento de los Daños”, que incluyó un coro entonado por solamente el público presente. “Pelo Suelto” fue otra de las sorpresas y Trevi la cantó con una peluca que emulaba la clásica melena que utilizaba a comienzos de los noventa. El cierre, con “Todos Me Miran”, quizás el himno LGBT más grande de la historia de la música latina.

Gloria recibe las ovaciones. Una vez más lo ha conseguido. Ha logrado que el público la ame, sin importar qué canciones cante.