Inspirada en una trágica nota de despedida, el bajista Mark Hoppus escribió la canción, que cumple 25 años, como una manera de liberarse de su propia sensación de ansiedad.
A fines de los años noventa, Blink 182 parecía tenerlo todo. Además, venían de hacer Dude Ranch, el disco que con canciones como “Dammit” o “Josie” comenzó a sacarlos del anonimato y pronto publicarían el que intuían que sería el primero de sus discos más exitosos, Enema Of The State de 1999 (No. 1 en el Billboard 200). Recordado por tres sencillos que se convirtieron en clásicos del rock mundial: “What’s My Age Again”, “All The Small Things” y “Adam’s Song”.
Una canción sobre la depresión adolescente y el suicidio que hoy está cumpliendo 25 años de haber sido lanzada (5 de septiembre de 2000, aunque el video de la canción salió meses antes del lanzamiento oficial del tema), que fue compuesta por el bajista y vocalista Mark Hoppus, quien en medio de todo ese salto a la fama, no se sentía del todo completo. El problema era más interno que externo, con la banda y con su equipo de trabajo todo estaba bien, pero él se sentía atrapado en sus pensamientos más oscuros. Pensamientos en los que surgieron frases como: “nunca imaginé que moriría solo y dentro de otros seis meses solo seré un desconocido”.
Pero “Adam’s Song” también estuvo movilizada por un acto real, por una nota de suicidio que dejó un chico antes de quitarse la vida y que impactó a Hoppus al punto de sentir que tenía que componer al respecto. El resultado fue tan profundo, que la canción que probablemente buscaba que los jóvenes se sintieran más seguros para tratar estas problemáticas, también impactó a un adolescente de la escuela secundaria Columbine que la escuchó constantemente antes de matarse.
Sin embargo la canción también ha servido de inspiración para otros jóvenes como una bloguera llamada Brittney Berlin, quien no solo ha tenido sus propios problemas de depresión, sino que también tuvo que pasar por la muerte autoinflingida de un amigo llamado Adam.
Dirigido por Liz Friedlander, el video de la canción se destaca por estar ambientado en una habitación – probablemente inspirada en las de sus fanáticos o las de ellos mismos durante la adolescencia – con fotografías colgadas en las paredes. Una puesta en escena que constantemente se alterna con momentos cotidianos de la banda y con tomas donde se ven personas que tal vez no la están pasando tan bien.
La directora habría querido reflejar cómo la depresión puede estar en todas partes, incluso cuando no parece evidente.
“Hoppus inicialmente temía que “Adam’s Song” bajara el tono de un disco que, por lo demás, estaba lleno de diversión relativamente inofensiva. Pero resultó ser una jugada maestra, ofreciendo un respiro bienvenido a mitad del álbum y demostrando que el trío podía ser igual de contundente cuando se tomaban las cosas un poco más en serio”, reseño Billboard, en un artículo publicado cuando el álbum que contiene el tema cumplió 25 años.
Si bien “Adam’s Song” no fue una de las canciones más destacadas dentro de los charts generales, sí tuvo un buen desempeño en el US Alternative Chart, donde escaló hasta el puesto No. 2.
Luego de la muerte de DJ AM (Adam Goldstein), en 2009, un amigo de ellos que murió en un accidente en un avión que se incendió por completo, la agrupación dejo de tocar la canción por varios años. En el artefacto también estaba Travis Barker, baterista de Blink 182, quien resulto considerablemente herido, pero se pudo recuperar gradualmente durante los meses posteriores. Cuando volvieron a interpretar el tema, los músicos que la canción había adquirido un nuevo significado, más positivo.